Llegando de la mansion (Laurien)

- Me parece bien...antes que me quite este muerto de encima, mejor me ira, asi no tendre la impresion que mi vida esta a la cuerda floja- le comente, esperando que aquello acabara pronto, queria que nada le pasara. Queria vivir. Aunque sabia que a partir de aquella tendria que torturar a mas gente, sin opcion a negarse, aunque, aquello era su mision y deberia hacer caso y realizarla- y...despues de esto, vendra otra y otra y otra mas,..asi que debere acostumbrarme a ello.- la mire a los ojos, mientras esperaba que lo ultimo que dijera no lo entendiera- parece que mis padres lo han hecho a posta para que me maten, en serio.....que asco...como me gustaria que fueran a ellos los que me mandaran torturar, porque lo haria...disfrutando....-

En un primer principio, quede un poco sorprendida por lo que le habia dicho aquella joven. Habia dado la responsabilidad, de que si ella moria, tendria ella que asesinar a la sangre sucia que lo hiciera. Que ironico, aunque sinceramente, era gusto, ella habia puesto su orgullo en juego, para salvara. Asi que le sonrei tranquilamente, metiendome en las mantas, tenia un poco de frio.

- Claro que lo hare...te lo debo- le comente sonriente, mientras hacia un gesto de victoria....-

- Me alegro, no soy tan mala persona y desagradable a tus ojos como pensaba- le comente sonriente- Asi, no debes darme esas gracias, tu has salvado mi vida, a si que yo vengaria tu muerte, no lo dudes- le asegure, mientras me destapaba un poco, para mirarla mejor- Aunque...no creo que murieses, eres una chica muy fuerte, antes caeria yo. Tu crees que ganaran los mortifagos?- pregunte sonriente, curiosa, la verdad es que no sabia que finalidad tenia esa guerra, aunque ella trabajaria para intentar mejorar y hacer que los mortifagos ganaran-

Mire al techo de aquella amplia habitacion, se podia que tenia muchos años, aunque estaba perfecto, cosa de magia....Una sonrisa se mostro en mi rostro, mientras rizaba con mi mano uno de mis mechones rubios, aburrida, y escuchando con atencion lo que decia la chica. La verdad es que ella deseaba que ganara su equipo, queria vivir, y aquella era la mejor manera.

- Que dios te oiga, porque sino, seremos pasto de aurores- bromee con aquel dicho, mientras reia divertida-